El grupo de jóvenes siempre ha sido muy importante para nuestra comunidad e incluso los jóvenes menonitas cuando llegaron a Uruguay ya tenían sus reuniones. Estos grupos incluyen desde estudios bíblicos hasta bailes, paseos y campamentos.
Actualmente, el grupo está conformado por más de 30 jóvenes de entre 14 y 25 años. Algunos estudian en Montevideo por lo que vienen a la colonia uno o dos fines de semana al mes, pero la gran mayoría estudia en Young (a 25km) y unos pocos ya trabajan. Tres jóvenes (elegidos por todo el grupo) y un matrimonio líder son los encargados de organizar las diferentes actividades y a su vez son el apoyo para todo el grupo. Cuando nuestros abuelos llegaron de Alemania al principio se reunían debajo de los árboles. Gracias al esfuerzo de toda la comunidad hoy tenemos nuestro salón para reunirnos, también cancha de volley y fútbol. Es nuestra responsabilidad mantenerlo limpio y ordenado.
Entre nuestras actividades están las reuniones de estudio bíblico, que se llevan a cabo los domingos por la noche comenzando con una alabanza a Dios (acompañados por un teclado y a veces guitarra, batería y piano). La palabra de Dios que compartimos es traída por uno de nosotros o por algún invitado. Además, una vez por mes, los chicos y las chicas nos reunimos por separado para tratar “nuestros” temas. ¡Esto es de muchísima bendición!
El sábado de noche se realizan diversas actividades, como jugar al volley, festejar algún cumple, fiestas (a veces organizadas por nosotros mismos), mirar alguna peli, etc.
El domingo de mañana nos encontramos en la iglesia para el culto y luego nos vamos a alguna casa a tomar mate y enterarnos de lo que haremos el resto del día. Generalmente, durante las tardes de verano nos vamos al arroyo -ya sea en motos o en un tractor con zorra- y cuando no jugamos al fútbol o al volley ¡nos dedicamos a sociabilizar!
Algo que nos encanta son las fiestas. ¿Para qué? ¡“Para recaudar fondos e ir a algún lado a chivear unos días”! Organizamos fiestas de disfraces, noches de gala, presentamos alguna obra de teatro, hacemos pizzas, las vendemos y las llevamos a domicilio, y muchas cosas más. Con el dinero recaudado nos vamos a las termas de Arapey en las vacaciones de julio y en verano salimos a algún otro lugar. Nos encanta acampar, cocinarnos unos guisos, hacernos buenos asados, alguna torta frita, tomar mate…en fin, disfrutar en compañia de los demás. ¡Ser parte de este grupo está de más!
En el verano, además, tenemos campamentos con los jóvenes de las cuatro congregaciones menonitas alemanas de Uruguay. Actualmente, este campamento se hace en el balneario “Cuchilla Alta” donde tenemos un predio con instalaciones cómodas para disfrutar al máximo. El objetivo de este encuentro, junto a establecer nuevas amistades y conocernos más, es profundizar nuestra relación con Dios y conocer su voluntad para defendernos en nuestra vida.
¡Obviamente acampamos y nos re divertimos!
Otros momentos de encuentro entre las congregaciones menonitas son el “Jugendtag” (=encuentro de jovenes) en las vacaciones de julio y el “Sportfest” (=Fiesta de deportes), que se realiza dos veces al año (en marzo y en octubre). En el “Jugendtag” nos dan charlas sobre temas específicos y en el “Sportfest” se hacen competencias de fútbol y volley. En ambos casos se alternan las congregaciones anfitrionas y por supuesto, no puede faltar el baile en la noche.
La base de todo lo que hacemos es nuestra fé en Dios. Sabemos que Él nos creó con un propósito muy especial y que nos ama con un amor incondicional. Por eso disfrutamos nuestra vida y nos apreciamos los unos a los otros.
*Las reuniones de jóvenes de los menonitas es algo que se practicó desde que nuestros padres y abuelos llegaron a Uruguay. En el campamento de Colonia se reunían los domingos por la tarde. Una excursión que realizaron por invitación recibida de los jóvenes valdenses, fue a la playa del Río de la Plata. ¡Según los cuentos, esta experiencia fue inolvidable para muchos! Ya en la colonia “El Ombú” se reunían los domingos de noche para los estudios bíblicos y los sábados de noche para el baile. Los paseos y campamentos se realizaban en el arroyo Don Esteban cerca de la “Bucht” (=bahía) o en “El Pinar”. Después, con más posibilidades, los viajes se hicieron a La Paloma, Santa Teresa y termas del Arapey, entre otros lugares.